En lugar de protestar y quejarte
por aquello que debes hacer simplemente encáralo y termínalo. Las dificultades
que intentas evitar no provienen del esfuerzo requerido para hacerlo, sino de
tu mala predisposición.
Hazlo. Hay montones de personas que
darían cualquier cosa sólo por tener la oportunidad de hacer eso que tú no
quieres. Piénsalo. ¿Es realmente tan terrible tener que hacerlo? No, por
supuesto que no. Poder sentirte útil es una bendición. Ser efectivo y
productivo debería ser motivo de alegría. Tienes una tarea especial por hacer.
Eres responsable de marcar una diferencia y tienes la capacidad para hacerlo.
¿Qué más podrías pedir?
No hay comentarios:
Publicar un comentario